¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos

La cantidad de herramientas de IA nos abruma. ¿Miedo a elegir mal? La parálisis por análisis es real, pero el costo de no hacer nada es mucho mayor. ¡Es hora de arrancar!

IA
inteligencia-artificial
decision-making
startups
innovacion
estrategia
prototipado
agilidad
negocios
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 1
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 2
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 3
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 4
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 5
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 6
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 7
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 8
¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, nos pasa a todos - image 9

¿Paralizado por el tsunami de la IA? Tranqui, no estás solo.

Nos está pasando a muchos. La cantidad de herramientas, frameworks y soluciones de Inteligencia Artificial que aparecen día a día es una locura. LangGraph, Vercel AI, Bedrock, CrewAI... cada semana nace algo nuevo que promete ser la "solución definitiva" a todos tus problemas. Y claro, uno se siente abrumado.

El ciclo interminable de investigar

Seguro te pasa: pasás el día leyendo noticias, viendo demos, y tu lista de "cosas tech para investigar" se hace interminable. Querés estar al día, no quedarte afuera, pero cada vez que terminás un tutorial, ya salió algo nuevo.

El resultado: La parálisis por análisis

Y ahí caemos. El miedo a elegir el camino "equivocado" es tan grande que la decisión más segura parece ser... no decidir nada. "Mejor espero a ver cuál es la que va a ganar", pensamos. Pero en el medio, nos estamos perdiendo un montón de cosas.

El verdadero costo de no hacer nada

Mientras vos dudás y esperás, tu empresa sigue funcionando como en la prehistoria digital. El costo de quedarse quieto es muchísimo más alto que el de mandarse una macana y tener que corregirla. El tren de la innovación está pasando, y si no te subís, te quedás mirando.

El gran secreto: nadie tiene el mapa completo

Acá va la posta: esto es nuevo para todos. Nadie tiene la fórmula mágica ni el camino marcado. La estrategia ganadora no es esperar a que aparezca la ruta perfecta. Es agarrar una brújula (o un GPS con poca batería) y empezar a caminar. El camino se hace al andar, y en la IA, más todavía.

La solución: un plan simple y radical

Olvidate de buscar la "herramienta perfecta" o la "solución definitiva". Eso no existe. Te propongo algo:

  1. Elegí UN problema de negocio que te esté doliendo hoy. Algo que puedas resolver con IA y que genere valor real.
  2. Construí un prototipo rápido y de bajo costo. No tiene que ser perfecto, tiene que funcionar para validar la idea.

No podés mejorar lo que no existe

El objetivo principal es aprender sobre la marcha y conseguir datos reales. Mandate. Empezá de a poco, pero empezá ya.

Cambiá la pregunta

Dejá de preguntarte: "¿Cuál es la herramienta perfecta para mi proyecto de IA?".

Empezá a preguntarte: "¿Qué pequeño paso, pero audaz, podemos dar esta semana para empezar a usar la IA y resolver este problema?".

¡Animate a dar el primer paso!

¿Vos qué pensás?

Este tema da para charlar largo y tendido. Me encantaría saber tu opinión o si viviste algo parecido.

Podés dejar tu comentario acá abajo o, mejor aún, sumarte al debate que se armó en Instagram. ¡Te espero ahí!

👉 Ver el posteo original y comentar en Instagram